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543. Algunos aportes del psicoanálisis al estudioso de su teoría

En el psicoanálisis es posible distinguir tres niveles: Primero, el psicoanálisis es un método de investigación que consiste esencialmente en hacer manifiesta la significación inconsciente de las palabras, los actos y las producciones imaginarias (sueños, fantasías, delirios) de un sujeto. Segundo, el psicoanálisis es un método psicoterapéutico basado en esa investigación de lo inconsciente, caracterizado por la interpretación de las formaciones del inconsciente —el sueño, los actos fallidos, las agudezas u ocurrencias, el olvido y el síntoma psíquico— bajo transferencia y en la búsqueda del deseo inconsciente del sujeto. Y tercero, el psicoanálisis es un conjunto de teorías psicológicas sobre numerosos aspectos de la vida de los sujetos y un conjunto de teorías psicopatológicas, en las que se han sistematizado los datos aportados por la clínica psicoanalítica, es decir, su método de investigación y de tratamiento del sufrimiento humano.

A nivel epistemológico, el psicoanálisis aporta una reflexión acerca de las condiciones de producción de su saber. Pero no solamente a este nivel: el psicoanálisis aporta una reflexión sobre su estatuto como ciencia y la constitución de su objeto de estudio. Su discurso enseña que el sujeto de la ciencia es el mismo sujeto del psicoanálisis, en la medida en que ese sujeto forma parte de la coyuntura que conforma la ciencia en su conjunto. A su vez, el psicoanálisis aporta a la epistemología un lugar dentro de las ciencias conjeturales, denominación dada por Lacan al objeto que subsume el cuerpo de las ciencias conjeturales, opuestas a las ciencias llamadas humanas, según las propias palabras de Lacan en «La ciencia y la verdad», texto de sus Escritos.

El psicoanálisis brinda también una actitud crítica muy aguda, dirigida sobre todo a los discursos que imperan en la modernidad —el discurso de la ciencia y el discurso capitalista— y los efectos devastadores que estos tienen sobre los vínculos sociales y los nuevos modos de organización social. Esto se puede observar en la falta de límites para el saber de la ciencia, el tratamiento que esta hace del sufrimiento humano borrando la subjetividad, la globalización y la influencia del mercado en la forma de concebir al otro —el sujeto vale por lo que tiene y no por lo que es—, el imperio de ideales que llevan a una individualización teñida de competencia y agresividad entre los sujetos —competitividad, emprendimiento, calidad total, excelencia académica, combatividad, éxito, etc.—, no saber qué hacer con los desechos que deja la ciencia y que agudizan el problema ecológico —la polución, las toneladas de basura, los desechos químicos y nucleares, etc.—, la ausencia de un anudamiento del sujeto dentro de una trama familiar, los fenómenos de violencia generalizada en todo el mundo, la especialización en el saber de los sujetos, la búsqueda de satisfacción a corto plazo, el consumismo desenfrenado de objetos por parte del sujeto contemporáneo, el ascenso del sentimiento de falta de sentido para la vida de los sujetos, la fragmentación del lazo social en guetos, la generalización de prácticas autísticas y perversas en la sexualidad de los sujetos con una deflación del amor, el surgimiento de todo tipo de comunidades unidas por un tipo específico de sufrimiento —grupos de obesos, homosexuales, tuberculosos, trasplantados, etc.—, la ausencia de la línea que separa lo privado de lo público, los fenómenos de toxicomanía, segregacionismo y mercadeo del cuerpo en sus diferentes niveles —tráfico de órganos, trata de blancas, esclavitud, prostitución infantil, etc.— y el surgimiento de comités de ética, solo para mencionar algunos de los problemas contemporáneos a nivel del vínculo social. Así pues, el psicoanálisis brinda una serie de conceptos teóricos que le permiten al sujeto abordar y comprender desde una posición crítica los estragos del discurso de la ciencia y del discurso capitalista, que, como bien lo dijo Lacan, no le deja ningún lugar al hombre.

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